Sanagasta

Conocida como la villa veraniega por los riojanos, Sanagasta lleva un nombre de origen indígena que hizo famosa la canción de Cafrune acerca de la iglesia de la Virgen Morenita. Muy próxima a la Capital, a sólo 30 km, es un pintoresco pueblo que se destaca en medio del agreste paisaje por sus espesas arboledas, que rodean a los viñedos y nogales, que lo convierten en un verde valle, con temperaturas muy agradables durante todo el año.

Allí se encuentra el mercado artesanal, montado en una antigua casona colonial con un bonito patio trasero parquiizado que le fue donada al municipio en 1890 para ser utilizada como Casa de la Cultura. El turista encontrará allí obras de artesanos locales y provinciales, además de sabrosos productos regionales, como dulces y nueces confitadas.

Vale la pena conocer el Parque Geológico, un predio de areniscas rojas compactadas que la acción milenaria del viento presenta formas caprichosas y originales. Su principal atractivo es el importantísimo hallazgo paleontológico de nidadas de huevos de dinosaurios (aparentemente saurópodos titanosauridos) y plantas fósiles de 65 a 95 millones de años.

Al subir por el valle por donde corre el río Huaco, se accede por elevados caminos de cornisa que permiten ver bellísimas vistas panorámicas hasta la Pampa de la Viuda, una pampa de altura custodiada por altos cerros. Por allí pasa la ruta que en un futuro llevará hasta Chilecito; actualmente ese camino se utiliza también para realizar competencias de longboard, aprovechando las fuertes pendientes.

Cerca de allí, el río Huaco ofrece bellos lugares para pasar el día y refrescarse en las aguas que corren a metros de la Ruta Provincial 75.